¡Saludos queridos usuarios de nuestra pagina web ! el día de hoy les traemos para su disfrute un comics porno del universo Marvel, en donde veremos a la sexy Miss Marvel de los vengadores competir con una de las milfs numero 1 de los X-Men, como lo es la mutante telepata la Reina Blanca. 
Ellas utilizarán sus deliciosos culos y coños para hacer acabar a todos los millonarios que hay dentro de la fiesta. Mientras que comienza el espectáculo aparece el Hombre Araña que inmediatamente queda atónito al ver como estas poderosas mujeres no son solo reconocidas heroínas sino también autenticas zorras sedientas de pollas.  Así que ponte cómodo y deleitate con este increíble cómic xxx que solo hallarás en ver cómics porno.  

Miss Marvel utilizando su fuerza y rapidez se dejaba follar por cuatro sujetos a la vez para poder ganarle a la Reina Blanca sin percatarse que esta última estaba utilizando otro tipo de estrategia un poco más sutil, «sus poderes telepáticos». Con estos lograba hacer que sus victimas pudieran eyacular mucho más rápido haciéndolos entrar en un trance de ultra erotismo que no podían aguantar y terminaban botando grandes cantidades de semen por todo el lugar.
Pasado un rato y luego de tantas corridas el arbitro de la competencia señalo que hubo un empate. Entonces para poder desempatar la Reina Blanca se dio cuenta que había un espectador que no estaba invitado y este era el Hombre Araña. Aprovechando su presencia y por supuesto su gran erección ambas milf comenzaron a follar con nuestro querido trepamuros.
Primero una buenas mamadas de estas super putas, la Reina Blanca para intensificar el placer introdujo su dedo en el ano del arácnido. Esto a Spidey no le agrado de mucho y la domino tapándole su boca con telaraña para luego penetrarla en su coño bien húmedo. Miss Marvel por su parte ayudaba al Hombre Araña durante el proceso hasta que le toco también sentir el sabor del semen de este superhombre bien dotado. Pasadas las horas todavía no había desempate y el Hombre Araña ya estaba fuera de combate, estas maquinas del sexo eran insaciables tanto que hasta al presentador se lo quisieron follar.